ÓPALO: EL JUEGO DE COLORES

Hola a todos.

En esta entrada  quiero escribiros sobre los ópalos. Antes de empezar con gemas más comunes, que las hay y muy bonitas, quiero seguir haciendo un recorrido por gemas raras como las que hay en entradas anteriores (tanzanita, Alejandrita, turmalinas multicolores…)

Los ópalos cumplen perfectamente con la denominación de “gema rara”, son muy diferentes a todas las demás. No sé si os he escrito alguna vez que colecciono minerales y piedras desde que era muy pequeña, y cuando veía en fotos los ópalos, no me atraían para nada, no me creía que fuesen de verdad. Pensaba que eran siempre de plástico y con purpurina por dentro, por lo que no les hacía ni caso…. Hasta que empecé a profundizar en el mundo de las gemas y cursando mis estudios en el HRD sobre gemas de color  conocí mejor los ópalos, y sobre todo, pude ver uno bueno y real. Impresionante.

Ópalo noble. Fuente: pinterest

Ópalo noble. Fuente: pinterest

Empecé a buscar más información a medida que los estudiaba, fotos, curiosidades… Y me di cuenta que no era la única que no “entendía” el sentido de los ópalos, que no han sido fáciles de describir desde el principio.

Hay que dejar claro que el ópalo normal, translúcido a casi opaco, el que no tiene juego de colores (ahora explicaré lo que es el juego de colores) es bastante común. Pondré fotos de este tipo de ópalo, pero el voy a tratar en esta entrada es el ópalo que se considera gema preciosa. El que tiene el llamado juego de colores.

En el libro de Cornelius de Gemología, se hace mención a la definición que hizo Plinio hace casi 2.000 años de los ópalos: “En él hay un fuego más delicado que en el piropo, tiene el púrpura de la amatista, el verde mar de la esmeralda, todos brillando conjuntamente en una unión increíble”.

Ópalo negro en bruto, sección transversal. Fuente Pinterest

Ópalo negro en bruto, sección transversal. Fuente Pinterest

Ópalo en bruto, destellos violetas y azules. Fuente Pinterest

Ópalo en bruto, destellos violetas y azules. Fuente Pinterest

Por ser tan especiales y fuera de lo normal, hubo un momento en el que se pensó que traían mala suerte. De pasar a ser tan valorado como el diamante, tuvo un bajón en su popularidad. Poco a poco se ha ido olvidando esa creencia y ahora vuelve a recuperar su sitio privilegiado en el mercado.

Ópalo en bruto, juego de colores desde el verde al naranja. Fuente Pinterest

Ópalo en bruto, juego de colores desde el verde al naranja. Fuente Pinterest

Voy a pasar a describir las propiedades físicas y ópticas de los ópalos.

El ópalo es amorfo. Está compuesto por dióxido de silicio hidratado  (SiO2 . nH2O). Es uno de los pocos minerales NO CRISTALINOS. Debería clasificarse realmente como mineraloide. Lo curioso es, que aun careciendo de estructura cristalina, el ópalo tiene un orden interno. Tras muchas investigaciones, se ha descubierto que el ópalo está compuesto por esferas minúsculas de sílice amorfa, estrechamente empaquetadas. En el ópalo común, las esferas están distribuidas al azar, de distinto tamaño y es lo que le otorga ese aspecto lechoso. En el ópalo noble, el llamado juego de colores es una propiedad óptica  producida porque las esferas de sílice están empaquetadas de forma ordenada y  del mismo tamaño, en una distribución tridimensional. La difracción de la luz cuando índice en esos planos de las esferas, es lo que produce esa mezcla de colores en el interior de la gema que parece que emite luz, que es lo que le otorga ese encanto y esa belleza. Ya he mencionado en post anteriores que una de las características que contribuyen a que una gema tenga más o menos valor, es la rareza.

Ópalo blanco forma de huevo. Fuente Pinterest

Ópalo blanco forma de huevo. Fuente Pinterest

Dureza: 5-6’5

Peso específico: 2’15

Fractura concoidal a irregular.

Brillo: vítreo a resinoso.

Transparente a casi opaco.

Color: casi todos los colores son posibles. Hay distintas denominaciones que se suelen usar para definir a los ópalos según su aspecto y color:

  • Ópalo blanco: tiene su base blanca, semitranslúcido, con juego de colores.
  • Ópalo negro: translúcido a casi opaco, base negra, con juego de colores.
  • Seminegro o gris: translúcido a casi opaco, color gris claro a medio, con juego de colores
  • Cristalino: transparente a semitransparente, base incolora, con un intenso juego de colores
  • Cristalino negro: igual que el ópalo cristalino pero con un color negro de base
  • Ópalo gelatina o de agua: transparente a semitransparente, base incolora con poco juego de colores o sin él.
  • Ópalo de fuego: transparente a semitransparente con una base de color amarillo, anaranjado o rojizo, con o sin juego de colores.

Existen numerosas denominaciones más del ópalo según si el juego de color se ve en bandas, en mosaico, a contraluz, etc.

Es isótropo (por ser amorfo), suele mostrar doble refracción anómala. IR 1’450. No es muy recomendable medir el índice de refracción con el refractómetro normal ya que el líquido de refracción puede afectar a la hidratación del ópalo y estropear el juego de colores. Nos podemos basar en el peso específico mejor para determinar que es un ópalo.

Ópalo blanco 2. Fuente pinterest

Ópalo blanco 2. Fuente pinterest

El ópalo blanco puede mostrar fluorescencia bajo UV larga y corta.

¿Diagnóstico del ópalo?

La característica más típica del ópalo es el juego de colores. El problema es que las imitaciones y el ópalo sintético también poseen esta característica. Observándolos vemos que las imitaciones y el sintético tienen manchas de color con estructura tipo celdilla denominada “tela de gallinero”, “piel de lagarto”.

Las imitaciones de plástico tienen un menor PE y dureza. El índice de refracción sin embargo es un poco mayor. El ópalo sintético fue primero comercializado por Gilson en los años 70.  Poco a poco han ido adquiriendo un aspecto mucho más convincente.

Ópalo sintético. fuente:Mllopis

Ópalo sintético. fuente:Mllopis

Es difícil ver el efecto piel de lagarto porque esa percepción es mejor hacerla en vivo, al tener la gema en mano e ir moviéndola. También es curioso ver como los colores se mantienen en un ópalo sintético al moverlo, mientras que en un ópalo natural, al mover la gema el color y la intensidad de color en una zona varían un poco porque el color depende de la luz que le llega a esa zona. Si tenéis fotos de ópalos sintéticos donde se aprecien estas cosas, podéis compartirlas si queréis.

Espero que os haya gustado esta entrada sobre ópalos, y que si os pasaba como a mi antes, que no os atraían mucho, con esto os pique la curiosidad y sintáis un poco más de interés por ellos.

Un saludo a todos.

2 comentarios (+¿añadir los tuyos?)

  1. cesar
    Dic 06, 2017 @ 02:12:35

    me parece muy interesante este tipo de materiales, de echo se donde encontrarlo en bruto se es difícil trabajarlo por que es frágil el material no se si es por que no tenga la dureza suficiente para la pulida, o si tenga un pulido especial, me ayudaría mucho con un comentario a mi correo. ya que se poco de ese tema saludos

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  2. nupascor
    Dic 06, 2017 @ 16:38:37

    Muchas gracias César por tu comentario. Te contestaré a tu email con la información que tengo sobre el pulido de los ópalos, que como bien has dicho, por su dureza y singularidad de colorido, necesitan un trabajo especial. Un saludo.

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